Lawrence y la su mundo antes de la guerra

En este trabajo, trataré de retomar el anterior hilo iniciado por el Coronel Reld, descubriendo las múltiples facetas (desde la pública hasta la más oculta y sórdida de este personaje a medio camino entre la historia y la leyenda).
A lo largo de los folios espero poder demostrar una serie de actuaciones ocultadas tanto por el personaje al redactar su libro: “Los Siete Pilares de la Sabiduría” como por las múltiples películas, libros, series de Televisión. Al tiempo que destruiré otras leyendas urdidas alrededor de este personaje como son las acusaciones de homosexual y la de defensor de los árabes.
Por último espero que resulte del interés del público los diferentes incisos que iré haciendo, pero que en mi opinión constituyen apartados necesarios para entender la totalidad de esta historia.
Finalmente, quiero exponer mi interés al redactar este trabajo: Hace poco en el cine acudí ver la última película de Benicio del Toro sobre ese adagio a la mediocridad militar que fue Ernesto “El Che” Guevara de la Serna. Reflexionando sobre este guerrillero pésimo, médico mediocre y revolucionario extraordinario, me di cuenta que era la antítesis a Lawrence de Arabia (un revolucionario de pacotilla, interesado siempre en la causa del imperio al que defendía, un arqueólogo mediocre y eso hay que reconocerlo un líder guerrillero de primer orden). Si el primero popularizó la guerrilla y le dio ese áurea casi mítica a esta forma de guerra, el segundo nos permite (a través del estudio de sus obras, pero no de sus palabras) contemplar tanto la miseria de la guerra como la brutalidad y crueldad de la guerra de guerrillas.
Hecho esta aclaración, pasemos a continuación al cuerpo del trabajo:


– Los orígenes familiares de Thomas E. Lawrence y su formación como agente:

Esta historia, arranca en la Isla de Irlanda cuando el futuro 7º barón de Chapman, Sir Thomas Robert Tighe Chapman (1846 – 1919) se escapó con la niñera de sus hijos para fundar una segunda e ilegítima familia en la isla de Gran Bretaña.
Fruto de esta unión nacería varios chicos, entre ellos el protagonista de nuestra historia. Pero no adelantemos acontecimientos:
Padre: Sir Thomas Robert Tighe Chapman (1846 – 1919); fue el típico terrateniente irlandés, el segundo hijo del Barón Willian Chapman y de su esposa Luisa (a su vez hija del coronel Arthur Vansittart de Shottesbrook). El típico matrimonio de alta sociedad, donde un cónyuge (el marido en este caso) aportaba fortuna y el otro (a su vez la esposa) aportaba apellido.
Pasó su infancia lejos de casa en los más caros y prestigiosos internados (en su caso el muy elitista Colegio de Eton). Para pasar a continuación a estudiar entre 1866 y 1868 en la Real Facultad de Agricultura de Cirencester. De donde salió a continuación para administrar para el resto de su vida (y vivir de sus rentas como el típico caballero rural) la propiedad de “South Hill” cerca de Devin (una pequeña pero próspera explotación de 170 hectáreas alquilada a aparceros irlandeses). Así como una casa familiar en un elegante barrio residencial en Dublín. Siendo considerado por tanto como un miembro de la aristocracia terrateniente Anglo – Irlandesa. (En total, disfrutaba de unas rentas entorno a las 20.000 Libras Esterlinas anuales, una verdadera fortuna para la época).
En 1870, su fortuna personal se incrementó, ya que su hermano mayor (oficial en el 15º Regimiento de los Reales Húsares Irlandeses) murió, dejándole su parte de la herencia paterna.
Casado en 1873 con Edith Sarah Hamilton (la hija de G.A. Rochfort-Boyd, Juez de Paz y Diputado del parlamento Irlandés). Fruto del matrimonio nacieron 4 hijas: Eva Jane Louisa (en 1874), Rose Isabel (en 1878), Florence Livia (en 1880) y Mabel Cecele (en 1881).
Para cuidar a las cuatro niñas y librar a la señora Chapman de la tarea de su educación, contrataron a una niñera nacida en el norte de Inglaterra pero con ascendencia Escocesa (joven, guapa y lo más importante que no fuera Irlandesa, para no manchar la familia y la casa con la presencia de un nativo o como se les apodaba «Paddy») de la que solo tenemos el nombre: Sarah Lawrence.
La señora Chapman empezó, al finalizar su cuarto embarazo, a manifestar un fuerte sentimiento religioso. Sometiendo a los miembros de su hogar a frecuentes reuniones de oración y a la desaprobación de la totalidad de los placeres mundanos (entre ellos el sexo matrimonial), cosa que desesperó al señor Chapman.
Para matar el deseo sexual, comenzó a beber demasiado (ah! Por fin aparece el irlandés que lleva dentro) y a buscar en otras personas el afecto sexual que su mujer no le daba.
Pronto se enamoró de la niñera de sus hijas, que era 15 años más joven que él. Y, según una de sus hijas, a pesar de ser un hombre de costumbres sobrias y austeras; se convertía en un modelo de generosidad, cada vez que aparecía ella.
Como era de temer, en 1885 la niñera se quedó embarazada. Por lo que para evitar el escándalo, tuvo que irse a vivir fuera del hogar familiar alquilando una mísera habitación en Dublin. En diciembre de ese año, nacería su primer hijo, siendo visitado regularmente por el señor Chapman. Hasta que la señora Chapman se enteró del asunto. (Parece ser que el mayordomo de los Chapman, mientras hacía la compra en una tienda de Dublin, escuchó a Sarah Lawrence presentarse a sí misma como señora Sarah Chapman). Por lo que el señor Chapman, dejó de vivir con su mujer y se fue a vivir a Tremadog (Caernarfonshire, ahora Gwynedd), en el norte del País de Gales. Donde nacería su segundo hijo ilegítimo, bautizado como Thomas Edward en agosto de 1888.
La familia permaneció poco tiempo en Tremadog, y pronto se trasladaron a vivir a Kirkcudbright (Escocia), luego a Dinard (en la Bretaña Francesa), la Isla de Wight y New Forest (Inglaterra), la elección de estos lugares dependía de que sus vecinos Ingleses no fueran de la misma clase social que los Chapman y por tanto no le identificaran. Por esta fecha la pareja se presentaban a sí mismos como el señor y la señora Lawrence.
En total tuvieron ocho hijos, de los que sobrevivieron cinco. En 1896, se instalaron definitivamente en Polstead Road (Oxford Gran Bretaña) con la intención de poder educar definitivamente a sus hijos. A pesar de los limitados medios económicos que tienen para este propósito.
El resto de su vida, el señor Chapman vivió una vida de ocio y pasó gran parte de su tiempo con sus hijos. Era fotógrafo, cazador, hablaba bien el francés y estaba interesado en la arquitectura medieval, enseñó a sus hijos la carpintería, e incluso en la vejez citaba de memoria a Homero y Horacio. También le gustaba recorrer largas distancias en bicicleta.
En 1914, al morir su primo Sir Benjamín Rupert Chapman, 6º barón de Chapman (1865-1914), heredó el título de 7º Barón de Chapman. En 1919 murió a su vez de muerte natural, siendo enterrado en Wolvercote, sin dejar ningún hijo varón como heredero legítimo. Por lo que el título está actualmente extinguido.

Madre: Sarah Lawrence, nacida el 31 de agosto de 1861 en Sunderland, County Durham, e inscrita al nacer con el apellido de soltera de su madre, Elizabeth Junner, que en el momento de traerla al mundo trabajaba como sirvienta en la casa de Thomas Lawrence, un agrimensor de la aseguradora Lloyd’s, y su hijo John Lawrence. Quienes los historiadores sospechan que fue el padre de Sarah Lawrence.
De su unión nacerían los siguientes hijos:

Montagu Robert Lawrence (1885–1971). Físico y médico misionero en China.
Thomas Edward Lawrence (1888 – 1935). Nuestro famoso Lawrence de Arabia.
William George Lawrence (1889–1915). Muerto en combate durante la guerra mundial.
Frank Helier Lawrence (1893–1915). Muerto en combate durante la guerra mundial.
Arnold Walter Lawrence (1900–1991), casado en 1925 con Barbara Thompson. Tuvieron una hija, Jane Helen Thera Lawrence (1927–1977) que se casó en 1947 con James Macdonald Cassels (1924–1994), que alcanzó el título de profesor de física en la Universidad de Liverpool en 1960. Tuvieron un hijo y una hija que viven todavía.
Sarah, moriría en 1959, completamente olvidada por la historia.

Centrándonos en Thomas Edward, sabemos que nace en Tremadog en el País de Gales, en el año 1888. Por lo que siempre se refirió a sí mismo como Galés de nacimiento (quizás para ocultar sus orígenes humildes e ilegítimos). Viviendo con su familia en el nº 2 de la Carretera de Polstead, Oxford. Su infancia transcurrió en la Escuela Primaria de Southfield primero y luego en la Escuela Secundaria de la Ciudad de Oxford para chicos. La primera de carácter público por los limitados recursos de la familia y la segunda de pago pero como alumno externo porque la familia no se pudo permitir mantenerlo en régimen de internado.
Su infancia transcurría entre las clases y, cuando disponía de tiempo libre, excursiones en bicicleta para visitar diversas iglesias rurales (la típica arquitectura militar y eclesiástica del sur de Inglaterra) así como actividades manuales parece ser que se le daba bastante bien las grabaciones en planchas de bronce de imágenes y temas medievales.
Tanto Thomas como sus hermanos William y Frank, se unieron a la Brigada Juvenil de la Iglesia (Una organización paramilitar, similar a los Boys – Scouts, que organizaba excursiones al campo, acampadas, deportes, música, etc.) En su parroquia de San Aldate.
En 1905, a imitación de sus hermanos se une como voluntario de fin de semana al Real Regimiento de Artillería de Sitio y acudiendo al Castillo de San Mawes (en el condado de Cornwall al sur de Inglaterra) para recibir instrucción como artillero. (El hecho que no exista más información y documentación se debe a que su servicio fue exclusivamente voluntario y actuando como milicia civil de fin de semana).
En 1907, acude al colegio de Jesús de la Universidad de Oxford para estudiar Historia y Arqueología aplicada.

Inciso Nº 1 => La Universidad de Oxford, los College y la ciencia de la Arqueología:

La Universidad de Oxford: Un imperio como el Británico, requiere de un cuerpo de funcionarios de primera para ser viable. Para obtener este cuerpo, se adaptaron estas dos universidades para formar a dichos funcionarios. Para obtener el ingreso en estos dos prestigiosos centros académicos, es necesario primero estudiantes pudientes cuyas matrículas cubran los costes de una formación de élite y en segundo lugar que estos estudiantes sean capaces de alcanzar el nivel requerido para mantener al Imperio Británico como ente superior al resto de naciones e imperios.
Además, el importe de las matrículas se incrementa para poder becar a otros estudiantes de élite, cuyos ingresos no les permiten por sí mismos costearse los estudios (como será el caso de Lawrence). Con lo que destruimos un mito, la universidad de élite no lo es por ser sus estudiantes miembros de la élite social; si no porque es capaz de formar a las élites que dirigirán a la nación.
La Universidad de Oxford nace en el siglo XI, de la unión de varios Colegios autónomos entre sí. Un colegio universitario, es una entidad autónoma propietaria de sus propios inmuebles, con su propio personal y su propio presupuesto (en algunos casos los colegios pueden tener mejores condiciones financieras que las universidades a las que están asociadas.) La misión del colegio es doble: por un lado proveen de alojamiento, comida, bibliotecas, actividades deportivas y sociales (al igual que, más o menos, nuestros colegios mayores). Pero por otro lado nombran a los tutores encargados de seguir y evaluar el desempeño de los estudiantes, así como facilitar algunas de las aulas académicas y de la formación de tipo teórica para la carrera que se está impartiendo.
Por su parte, la universidad provee las clases y marca los estándares educativos mínimos, realiza los exámenes y otorga los títulos.
En el caso particular de Oxford, se tratan de un total de 40 salones (equivalentes a nuestras facultades con sus correspondientes laboratorios, centros de investigación, aularios, etc.) y colegios. Al frente está un vicecanciller (El canciller solo tiene un cargo simbólico) del que dependen los diferentes departamentos académicos (encargados de elaborar las materias académicas que cada carrera y curso deben impartirse, así como la evaluación de las mismas. Aparte se encargan de desarrollar la investigación, proveer facilidades para la enseñanza y el aprendizaje y organizar las conferencias y los seminarios).
Las normas universitarias se discuten en tres Asambleas (la Congregación: formada por todos los académicos de la misma y se encarga de lo referente a temas académicos y planes de estudio. La Convocación: formada por todos los graduados y versa sobre temas disciplinarios. Y el Consejo Universitario, para lo referente a la administración interna y las finanzas de la institución).
Cada Colegio Universitario hace por separado la admisión de alumnos y el año preparatorio, fijándose sobre todo en los méritos académicos y el potencial de cada alumno. (Estableciéndose un complejo sistema de varemos donde se tienen en cuenta: las referencias escolares, los ensayos personales, resultados académicos conseguidos, resultados predichos, trabajo escrito, pruebas escritas y entrevistas).

En el caso particular del Colegio de Jesús de Oxford: (Fundado en 1571 con la intención de formar a los nuevos sacerdotes de la nueva religión anglicana por orden de la reina Isabel I), tradicionalmente pensado para estudiantes Galeses. Con el tiempo fue incrementando sus opciones académicas a términos tipo: Educación, Ciencias Sociales y Pastorales, Salud, Derecho, Comercio y Economía, Tecnología y Ciencias físicas, Agricultura e Ingeniería y Organización Industrial.

Respecto a la arqueología; es la disciplina que estudia las diferentes sociedades a través de sus restos (para entendernos, la parte científica de la historia). Operan tanto desde el campo del hecho histórico demostrado como desde el campo antropológico (para explicar los hechos acontecidos).
Sus campos de actuación son: el estudio arqueológico (prospección, excavación análisis de laboratorio), la datación (según los diferentes métodos científicos de estimar la antigüedad de un objeto), la arqueología adjunta (etnología, el paisaje, los materiales, la botánica, la zoología, restos óseos, actividades aéreas y subacuáticas) y la arqueología cronológica (prehistoria, historia antigua, medieval, moderna y contemporánea) – espacial (Europa, pueblos bíblicos, americana, oriental, africana, etc.).
El hecho que Thomas E. Lawrence se inclinara por esta carrera y no por otra, es un hecho del que solamente él sabe el motivo. Pero sospechamos que su afición a la historia militar de las cruzadas tubo mucho que ver.

Lo que sí se sabe con certeza es que fue un alumno becado, por sus calificaciones escolares y que los dos cursos que realizó (1907 y 1908), los acabó con notas equivalentes a nuestra matrícula de honor en todas las asignaturas (en general fue el primer alumno por calificación media).
Los dos veranos, los aprovechó para incrementar su Francés, viajando en bicicleta visitando varios castillos de la edad media (tomando fotos con una cámara prestada por la universidad, elaborando los planos de cada uno). Más tarde este estudio presentado en el Colegio universitario fue ampliamente aplaudido por su complejidad y profundidad.
Y no solo por sus compañeros y sus profesores, sino por alguien más que enseguida notó su talento para el estudio de campo.
Para obtener el título de la universidad, necesitaba realizar un trabajo final (nuestra tesis de fin de carrera o proyecto) Y Thomas deseaba hacerlo sobre algo relacionado con las cruzadas. Pero no tenía ni los medios ni el dinero para realizar un trabajo equivalente al de los castillos medievales Franceses en Tierra Santa.
Sin embargo en el verano de 1909, le tenemos andando por el medio del desierto de Siria. ¿De donde sacó el dinero?


Mi tesis es que fue captado por la inteligencia Británica que a principio de siglo andaba buscando buenos talentos, en aras de un conflicto que se preveía inminente con Alemania y en aras de asegurarse el recurso más estratégico del planeta a medio plazo: El Petróleo.
Para entender esta tesis debo aclarar lo siguiente:

Inciso Nº 2 => Los trabajos de inteligencia y la oculta historia de la explotación del petróleo:

1 – La captación de agentes: Oficialmente, Lawrence no entró en la nómina del servicio secreto hasta el año 1914. Pero este hecho no impidió que, a cambio de una generosa contribución económica que le permitiese completar su tesis doctoral, realizar algún que otro favor a la inteligencia Británica.
Quizás sea solo una especulación, pero en mi opinión lo único para lo que estaba capacitado en ese momento era para apuntar en un mapa las diferentes fortalezas y posiciones ocupadas por el ejército otomano, realizar dibujos (siempre tuvo buen pulso, una memoria especialmente envidiable y un trazo muy seguro lo que hacía de sus bosquejos pruebas bastante fiables y sólidas) y fotografías.
Con este material, junto con las informaciones sobre los caminos y vías férreas disponibles, los británicos pudieron hacerse una idea bastante buena del tamaño y capacidad de las fuerzas Otomanas desplegadas por la zona.

2 – El petróleo y el conflicto con Alemania: A parte de las rivalidades que Gran Bretaña y Alemania mantenían en Europa. Existía un problema aun mayor que enfrentaba a todas las potencias industriales del mundo. Era un hecho que la tecnología de la máquina de vapor había llegado a su cima y no podía dar más de sí. Por lo que la nueva tecnología del motor de combustión interna sería quien dirigiese los destinos de la tecnología mundial y sobre todo las potencias que fuesen capaces de dotarse de esta tecnología se diferenciarían de las que no.
El hecho claro era el siguiente: Los barcos movidos con petróleo navegaban más rápidos (imprescindible para la guerra y el comercio). Los automóviles y camiones movidos a petróleo podrían por sus reducidas dimensiones llegar a todos los puntos para los que no existía la posibilidad de llevar un ferrocarril y las cargas desplazadas, eran mucho mayores que las empujadas por cualquier caballo u otro animal. Los aviones, solo despegaban con motores de gran potencia, cosa que ninguna máquina de vapor podía alcanzar con el mínimo peso requerido para el despegue.
Los problemas eran dos: el primero que al ser combustible que a temperatura ambiente era líquido; por lo que el consumo y duración era por esta naturaleza física mucho menores que el sólido carbón. El segundo era mucho más grabe. Había depósitos de carbón en cualquier parte del mundo, pero ¿Dónde hay Petróleo? Por aquellas calendas, no existía ninguna tecnología especial, simplemente se picaba por donde alguien hubiese encontrado petróleo y a base de cavar pozos se encontraban nuevos pozos. En ese momento se habían descubierto depósitos petrolíferos en:

Zonas del sur – oeste de los Estados Unidos, regiones del centro y sur de Rusia, regiones del norte de México fronterizas con las zonas petrolíferas de Estados Unidos. Y también se descubrió que Persia nadaba en un mar de Petróleo.
Los Británicos estaban en ese momento, sin una sola gota de petróleo propio y el flamante ministro de marina – primer Lord del Almirantazgo Wiston Churchill quería convertir su armada a carbón en una flota movida a fuel. Por lo que empezaron a buscar un suministro seguro de petróleo.
El primer invitado por el imperio Británico para regalar este preciado líquido fue Persia a finales de siglo XIX, seguido de las concesiones que obtendría en Sudamérica a partir del primer descubrimiento de petróleo en Argentina en el año 1907 y de la explotación del petróleo de la Federación Malaya en 1910.
Pero los geólogos no tardaron en sospechar que había más bolsas fuera de sus fronteras y más concretamente en las provincias Otomanas de Levante (Las actuales Siria, Líbano, Israel, Palestina y Jordania) y Mesopotamia (Las actuales Iraq, Kuwait, Bahrein, Qatar, Los Emiratos Árabes Unidos). Por lo que empezaron a interesarse con la posibilidad de tener sus propios pozos de petróleo seguros en alguna colonia o por lo menos en algún país controlado por ellos. Nacería así la diplomacia del petróleo.
Sin embargo para lograr este último objetivo debían enfrentarse a dos poderosos rivales: por un lado estaban los Estados Unidos cuyos magnates del petróleo aspiraban a monopolizar toda la explotación mundial (a decir verdad este era un problema menor, porque en este momento de la historia, el ejército y la armada de los Estados Unidos no son rivales para los Británicos) y por otro lado está Alemania, cuyos técnicos han abierto los grandes campos de Rumanía (el Boom del petróleo de 1900) y se dirigen hacía Turquía para hacer lo mismo.

Concretamente, en el año 1912 se crea la Compañía Turca de Petróleo, con la intención de explotar los primeros campos descubiertos en la región norte de Mesopotamia (actualmente el norte de Iraq o Kurdistán). Descubierto con ingenieros norteamericanos.

La idea de esta compañía fue del señor Calouste Gulbenkian (Ciudadano Turco de etnia Armenia, nacido en 1869, fue enviado por su padre para estudiar ingeniería en Gran Bretaña [y nacionalizándose británico en el año 1902], trabajando más tarde en Rusia en Bakú en la industria del petróleo de la que llegó a ser todo un experto.
En 1907, trabajó por la creación de la primera multinacional Europea del petróleo, la Royal Dutch / Shell, de la que poseería el 5% del capital social. Más tarde comenzaría a comprar acciones en otras compañías europeas y americanas tratando siempre de poseer el 5% de las acciones [para tener siempre acceso a los movimientos y estrategias de estas grandes sociedades]. De ahí su mote en la prensa: - Señor 5% -.
En un intento de evitar que los imperios europeos desgarren su propia nación (sobre todo temiendo por la vida de sus familiares Armenios) creó la Compañía Turca de Petróleo, para explotar los hidrocarburos de la nación invitando a participar en la misma a cuantas compañías únicamente Europeas quieran.
Sin embargo el estallido de la guerra mundial y el posterior desmantelamiento del imperio acaban con esta iniciativa.
La nueva nación de Iraq acabó bajo mandato Británico y las instalaciones y pozos de petróleo quedaron bajo control de [ósea pasaron a ser propiedad de] la Compañía Iraquí del petróleo, que no era otra cosa que, una filial local de la Compañía Anglo – Persa del Petróleo [que de Persa lo único que tenía es el nombre y que acabaría llamándose BP – Brittish Petroleum – Petróleos Británicos – Que en opinión de un servidor es una denominación mucho más precisa y correcta]. Si bien participarían varias empresas más.] Por su parte el señor Gulbenkian en calidad de ciudadano Británico por lo menos pudo retener el 5% de las acciones de esta sociedad. Participación que, eso sí, revendió al gobierno turco [propietario nominal de la Compañía Turca de Petróleo] en 1928 por los acuerdos de la Línea Roja [por el que esta compañía renunciaba a sus derechos en el territorio de Iraq al tiempo que se creaba un monopolio de grandes empresas no públicas para explotar el petróleo del oriente medio, salvo Kuwait que seria colonia Británica.
Estas empresas se convertirían en las mayores empresas del mundo de su ramo. Hoy en día se las llama las Seis Super – mayores, su monopolio duraría hasta la creación de la OPEP.]
Haciéndose un hombre extremadamente rico y dedicándose a partir de entonces exclusivamente a su mayor afición el coleccionar obras de arte y practicar la caridad con diversas sociedades “filantrópicas”.
Entre 1930 y 1932 presidió al Unión Armenia para la Beneficencia General, que era una sociedad sin ánimo de lucro que ayudaba a los refugiados del genocidio [primero localizaba a los supervivientes, mandaba sus datos al resto de comunidades por si había algún familiar que pudiese ayudarles y si esto no era posible les hacía entrega de un préstamo para empezar una nueva vida en el país de acogida o en cualquier otro]. Pero debió de abandonar esta presidencia, cuando Armenios refugiados en la República Soviética de Armenia, le acusaron por su convivencia con el régimen Otomano y su silencio durante el genocidio.
En 1938, fundó en Panamá la compañía Partex, para gestionar todos sus activos y participaciones en empresas del gas y del petróleo. Con el dinero así canalizado, creó más tarde en Lisboa la fundación Gulbenkian.
Entre 1942 y 1944 fue embajador de los gobiernos Iraquí e Iraní en la Francia de Vichy (de la que obtuvo carta de inmunidad diplomática). Si bien se sospecha que en realidad se dedicaba a hacer negocios con los Nazis, a cuenta del deseo que tenían los gobiernos de Irán e Iraq de deshacerse del yugo colonial Británico.
Entre 1944 y su fallecimiento en 1955, residió de nuevo en Lisboa; dejando la fundación Gulbenkian a sus herederos al tiempo que hacía obras de caridad y habría un museo en esta ciudad para mostrar todas sus obras de arte.)
De todas formas la historia no acaba aquí, pero no quiero adelantar acontecimientos.

3 - ¿Porque él y no otro? Bueno, la verdad es difícil. Pero sospecho que sus jefes Británicos querían llevar el asunto con la máxima discreción posible.
Después de todo trabajaban más por los intereses de ciertas compañías petroleras británicas y agentes de la City que para los intereses del imperio Británico. Y dentro del marco de la discreción un pobre estudiante de arqueología, que no tenía absolutamente nada que ver con el gobierno Británico y que podía ir haciendo los trabajos requeridos con habilidad y sobre todo discreción.
Tenemos así al agente perfecto, ni él mismo sospechaba en que estaba metido ni cuales eran los verdaderos beneficiarios de su trabajo.


Sea como sea, lo cierto es que en el año de 1909 realiza un periplo por el desierto de Siria (La franja de desierto comprendida entre la orilla occidental del río Eufrates y la costa Mediterránea). Que durará 3 meses.
En ese tiempo visitará un total de 36 castillos y fortalezas cruzadas (actualmente diseminados por el sur de Turquía, Siria y Palestina) recorriendo según él un total de más de 1.500 Km. en Bicicleta.
De paso y según los biógrafos de Thomas E. Lawrence; realizará un estudio detallado de los acuartelamientos del Ejército Otomano, su situación real y sobre todo el tamaño de la guarnición y la cantidad de tropas.
Con todos los datos reunidos; volverá a Gran Bretaña a tiempo para presentar su tesis: - “Influencia de las Cruzadas sobre la arquitectura militar Europea a partir de finales del siglo XII” – Con el resultado que después de su defensa y exposición en público obtendrá el título de doctor con una nota media de matrícula de honor.

(*) A decir verdad, su tesis se estudia hoy en día en especial el apartado en que compara sus observaciones sobre determinadas fortalezas de los Cruzados y el castillo que visito en Châlus, Francia.

En 1910, decidió realizar un pos – grado sobre el apasionante tema de “alfarería medieval” impartido en el colegio universitario de la Magdalena de Oxford. Al término del cual obtuvo una beca para realizar prácticas de arqueología en Oriente Medio.
Para el mes de diciembre de ese mismo año, viaja a Beirut. Para dirigirse a continuación a Byblos (en el actual Líbano) donde hizo un curso intensivo de Árabe para poder defenderse solo en esa lengua. Tras lo cual se unió a la expedición de los eminentes eruditos D.G. Hogart y R. Campbell – Thompson; quienes por cuenta del Museo Británico (y después de muchas negativas habían obtenido la financiación para su proyecto: realizar un completo estudio y excavaciones para sacar a la luz las civilizaciones de la antigua Mesopotamia). El trabajo se realizó en varias zonas de la región de Carchemish (Jerablus en el Norte de la actual Siria); el objetivo era identificar el motivo de porqué las diferentes civilizaciones Persia, Asiria, Babilonia, Etc. se parecían tanto y fueron ellos los que sacaron a la luz que estas habían mamado de una serie de fuentes comunes, las civilizaciones Hitita, Sumeria y de Ur.
De lo que nunca sospecharon, es que si el gobierno británico les financió de repente estas excavaciones no era tanto por descubrir una nueva civilización oculta por la historia y la arena del desierto sino porque estas se iban a realizar en un área cercana a la frontera entre las actuales Turquía, Siria e Iraq y que habían admitido en su equipo al joven Lawrence en prácticas (y que por tanto su nombre no figuraría en los cuadernos de campo). El trabajo de Lawrence a parte del meramente académico era cartografiar la zona en especial la conjunción ferroviaria entre Bagdad y Estambul (que por ser un eje estratégico para las autoridades Otomanas, sistemáticamente lo mantenían oculto en los mapas o en su lugar falseaban el mapa).

Durante su estancia en Carchemish, recibió varias veces la visita de Gertrude Bell (1868 – 1926). Nacida en Inglaterra en una familia de gran influencia y fortuna. Fue de las pocas mujeres de su época que se graduaron en la Universidad de Oxford en historia. También con una nota media de matrícula.
Como su tío era embajador en Persia, en 1892 viajo a visitarlo y después viajó por todo el mundo. Entre 1899 y 1905 realizó varios viajes a oriente próximo visitando a diversos jefes árabes y a varios líderes de la comunidad Drusa. – Lo que me lleva a sospechar que también era agente de la inteligencia Británica –. En 1909 viajó al norte de Siria donde conoce a Lawrence de Arabia – mis sospechas son que actuaba de correo recogiendo las observaciones y apuntes que tomaba Lawrence y ocultarlas entre sus ropas de mujer, que estaba segura ningún aduanero Turco o Europeo inspeccionaría.
En 1913 visitó el desierto de la actual Arabia Saudí, realizando un profundo reconocimiento de la zona. Al tiempo que compaginaba estas actividades con su apoyo a la causa contra – sufragista.
Durante la guerra mundial, se unió a la cruz roja Francesa, al tiempo que operaba en la oficina árabe del cuartel general Británico en El Cairo. Parece ser que fue ella quien tuvo la idea de organizar la revuelta árabe que Lawrence acaudillaría contra los turcos.
Con el fin de la guerra, junto con Lawrence se convirtió en asesora de Wiston Churchill a la conferencia de El Cairo de 1921 donde se trazaron las fronteras de los actuales países de Oriente Medio.
En 1926, logró que las autoridades en Iraq abrieran un museo arqueológico para preservar los ricos yacimientos de la nueva nación de saqueadores de todo tipo. Sin embargo su pobre salud [parece ser que su tabaquismo le produjo un cáncer de laringe] y la de su hermano Hugo [muerto de Tifus], minaron su salud física y mental, por lo que ese mismo año apareció muerta en su habitación por sobre dosis de píldoras para dormir. No se sabe si fue un suicidio o un accidente. Siendo enterrada en el cementerio de Bagdad.
Nunca se casó ni tubo descendencia, sus escritos fueron publicados en 1927 por su madrastra ocupando dos volúmenes completos.
Mujer que le impresionó mucho, tanto por su porte (aunque era unos 20 años mayor que él, parece ser que se enamoró y algunos afirman que juntos en medio del desierto se convirtieron en amantes por un corto periodo de tiempo).

En 1911, volvió a Inglaterra por un corto periodo de tiempo y para noviembre de ese año volvió a desembarcar en Beirut. Sus tareas fueron participar en una segunda temporada de excavaciones en Carchernish, hasta mediados de 1912 y luego por consejo del museo Británico viajó a Egipto a participar como ayudante de William Flinder Petrie en la excavación de Kafr Ammar. La idea general era que obtuviera la suficiente experiencia como para dirigir sus propias excavaciones.
En 1913, volvió a trabajar en diversas expediciones por Oriente Medio, encargándose de llevar a cabo sus propias excavaciones. Básicamente cuando aparecía un nuevo yacimiento él se encargaba de catalogarlo, señalarlo y prepararlo para un estudio más serio por parte de las diferentes autoridades académicas.

Este mismo año, conocería al que sería su mejor amigo y auténtico compañero de fatigas: Charles Leonard Woolley (1880 – 1960) hijo de un clérigo anglicano, sus hermanos fueron oficiales del ejército. Aunque él prefirió la Universidad de Oxford.
Participó en excavaciones en Roma, 1905. En Oriente Medio, 1906 y en el descubrimiento de Ur entre 1912 y 1914 momento en que conoció a T.E. Lawrence.
Durante la guerra presta servicios con él en el departamento oriental del cuartel general de El Cairo en Egipto, pero declinó tomar parte en la expedición de 1916 que inició la revuelta árabe.
Después de la guerra, en 1922 continuo con diversas excavaciones por toda Mesopotamia trabajando al 50% con el Brittish Museum y con la Universidad de Pennsylvania. [La mayoría de estos yacimientos habían sido acotados, previamente, por Lawrence].
Entre 1936 y 1939 trabajó en diversos proyectos para estudiar las civilizaciones del Egeo y de la antigua Mesopotamia descubriendo las ciudades de Alalah (Turquía) y Al Mina (Siria).
Durante la II Guerra Mundial, trabajó en el departamento de monumentos y artes de los ejércitos combinados aliados, para detectar y prevenir el robo y expolio de obras de arte por toda Europa.
Volviendo a trabajar a Alalah hasta su retiro en 1949).
En 1914, la inteligencia Británica opta por fin por darles de alta en sus filas (con lo que a partir de entonces tendrían un sueldo fijo a parte de sus empleos como arqueólogos) y les envió en su primera misión y actuando con la tapadera de arqueólogos al desierto del Neguev a buscar pueblos Bíblicos (más concretamente alegaron en sus visados que buscaban el desierto de Zin [el lugar donde debió quedar encerrado Moisés y su hermano Aarón por pecar y ser, en consecuencia, negada su entrada a la tierra prometida] y pruebas del paso de Moisés con los hebreos en su huida de Egipto a Israel). Financiando sus trabajos con el llamado “Fondo para la Exploración de Palestina” [que es un fondo existente, desde el año 1865 hasta nuestros días con la intención de demostrar la veracidad de lo que contiene la Biblia con pruebas arqueológicas]. Durante más de seis semanas.
En realidad todo era una cortina de humo, para realizar un estudio cartográfico del área comprendida entre el Canal de Suez y las ciudades de Áqaba y Petra. Registrando en mapas de tipo militar todas las posiciones, los puestos de frontera, los controles y los puestos de observación y vigilancia del Ejército Otomano, así como todas las fuentes de agua potable existentes.
A mediados de 1914 estaban de nuevo en El Cairo con toda la información oculta entre diferentes cajas de muestras para análisis.
Durante un breve tiempo, Lawrence es enviado de nuevo a Carchemish, para nuevas excavaciones en los alrededores y para hacer un recuento de los ferrocarriles militares que cruzaban la línea férrea camino de Bagdad. Volviendo precipitadamente a El Cairo cuando en Agosto de 1914 estalla la guerra.
Parece ser que tanto Lawrence como Leonard Woolley trabajaban en inteligencia a las órdenes del entonces capitán, S.F. Newcombe (Existe poca información fiable del oficial Steward F. Newcombe. Parece ser que era oficial de los Reales Ingenieros y en El Cairo estaba al cargo de la custodia de los Mapas del Estado Mayor. A parte de Lawrence y Wolley tenía otros 4 equipos más recorriendo y cartografiando el área del Sinaí, todos pagados con el Fondo para la Exploración de Palestina. También trazó las posibles rutas de invasión Turcas hacia el Canal de Suez, según los pozos de agua y las pistas por los desfiladeros del desierto.
Durante el conflicto, siguió elaborando mapas topográficos y militares en diferentes Frentes, primero en Francia y luego precipitadamente debió de regresar a Palestina puesto que los generales se quejaban de la mala calidad de los mapas existentes, logrando él mejorar el sistema de cartografiado.
En 1916, fue tomado prisionero por los Turcos después de la batalla de Kut – Al – Amara y permaneció en cautividad hasta 1919. Alcanzó el grado de Teniente Coronel y ese mismo año fue nombrado por la Liga de naciones oficial del censo para el Mandato de Palestina, cargo que ocupó hasta su retiro en 1924. Volviendo a Gran Bretaña).
Por consejo de este, ambos pospusieron su alistamiento voluntario hasta Octubre de ese año, con lo que se ahorraron las avalanchas de entusiastas reclutas, mientras que Newcombe les tramitó su entrada como oficiales del cuerpo de Servicios del Ejército – Sección de Topografía con el rango de Tenientes de 2ª. En realidad otra tapadera para ocultar su pertenecía al servicio secreto (con lo que además de sus sueldos de militares percibían una segunda paga de agente de inteligencia. Siendo entre sus compañeros militares de los que mejor vivían).